...Rosas Rojas Para Mi Doctor Corazón que cada día se parece más a una flor....
Tu dulzura, mi amor, he de contártelo con dos rosas.
Pétalos encargados del amor que con su aroma y elegancia propaga por el universo el gusto especial de cada persona.
¿Cómo conferirte con una rosa blanca? grotesco, en verdad, pues, es imposible ver la honradez de tu espíritu cubierto de encanto, misericordia y candor.
Tan pura como también lo es tu integridad, rodeado de aspirantes dispuestas a apoderarse de ella y deleitarla como el más presumido trofeo.
Tu piel libre, clara como la luz del día , recorre a lo largo de tu cuerpo describiendo un torso único e incomparablemente perfecto. La suavidad de tu piel también se hace eco en mi mente, cubierta por un manto cándido y cristalino que no me deja pensar en nadie más que en ti.
Ojo, ten prudencia con tus virtudes, pues si es una corrompida gota oscura la que has de llevar en tu alma, se nublarán tus emociones, oscurecerá tu simpatía, candidez y amargará la dulce virtud que te envuelve.
La rosa roja, como la pasión que consume la flecha del amor, cruzará tu corazón y lo hará reventar liberando el río de pasión y viles inclinaciones que tenías oculto durante tanto tiempo.
La rosa roja es como tus labios, humedecido de polen que con un beso surgirá una historia de amor que prosperará con el paso del tiempo y conquistará enjambres de celos y rencor. Pero aunque el final sea ineludible como la flor se desflora el amor también permanecerá un recuerdo de todo lo gozoso y dolorido, aquella sonrisa y aquel disgusto subsistirán impresos en ambas mentes, por más que el brisa pretenda empujarlos hacia el olvido.
Pero si cruzas la rosa roja con una negra, se desarrollará un amor feroz y malicioso, un rojo oscuro repleto de pensamientos picantes y goces ilícito. Será una adicción, una sombra difícil de quitar.
En cambio, entre una roja y una blanca creará algo fantástico, sería como tú, se convertirá en mi rosa preferida, la que me acompañará toda la vida....
Pétalos encargados del amor que con su aroma y elegancia propaga por el universo el gusto especial de cada persona.
¿Cómo conferirte con una rosa blanca? grotesco, en verdad, pues, es imposible ver la honradez de tu espíritu cubierto de encanto, misericordia y candor.
Tan pura como también lo es tu integridad, rodeado de aspirantes dispuestas a apoderarse de ella y deleitarla como el más presumido trofeo.
Tu piel libre, clara como la luz del día , recorre a lo largo de tu cuerpo describiendo un torso único e incomparablemente perfecto. La suavidad de tu piel también se hace eco en mi mente, cubierta por un manto cándido y cristalino que no me deja pensar en nadie más que en ti.
Ojo, ten prudencia con tus virtudes, pues si es una corrompida gota oscura la que has de llevar en tu alma, se nublarán tus emociones, oscurecerá tu simpatía, candidez y amargará la dulce virtud que te envuelve.
La rosa roja, como la pasión que consume la flecha del amor, cruzará tu corazón y lo hará reventar liberando el río de pasión y viles inclinaciones que tenías oculto durante tanto tiempo.
La rosa roja es como tus labios, humedecido de polen que con un beso surgirá una historia de amor que prosperará con el paso del tiempo y conquistará enjambres de celos y rencor. Pero aunque el final sea ineludible como la flor se desflora el amor también permanecerá un recuerdo de todo lo gozoso y dolorido, aquella sonrisa y aquel disgusto subsistirán impresos en ambas mentes, por más que el brisa pretenda empujarlos hacia el olvido.
Pero si cruzas la rosa roja con una negra, se desarrollará un amor feroz y malicioso, un rojo oscuro repleto de pensamientos picantes y goces ilícito. Será una adicción, una sombra difícil de quitar.
En cambio, entre una roja y una blanca creará algo fantástico, sería como tú, se convertirá en mi rosa preferida, la que me acompañará toda la vida....
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