Misterio
En el efímero tiempo que caía una pétalo, Que sobrevolaba un ave, Que sucumbía un concierto, comencé a ambicionarte, en silencio te amaba. Y en todo ese tiempo, Que contienen los años, Los sufrimientos todos, Todos los instantes, Miles de noches despierta añorándote, Montones de inviernos con deseos de cobijarte, entraba el Verano y la pasión en mi corazón crecía, y en las noches estrelladas yo te vi, arrogante, impetuoso y lleno de alegría, y yo añorando tener tu compañía, se iba la noche y volvía el día y tu en mi corazón aun permanecía, y seguías tu sin darte cuenta que yo existía, pero como no amarte si en mi corazón vivía, como no soñarte si eras todas mi alegría, y me conformaba con verte cada día aunque en tu corazón yo no existía
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